El narco Juan Carlos Ramírez, alias ‘Chupeta’, quedó en libertad luego de acuerdo con la justicia en Estados Unidos 

¿Quién es alias “Chupeta”, el capo sentenciado a 20 años de cárcel por hablar contra el “Chapo” Guzmán en EEUU?

La libertad de alias ‘Chupeta’: el capo que transformó su rostro y su destino

Por años, alias ‘Chupeta’, el narcotraficante Juan Carlos Ramírez Abadía, encarnó el poder y la astucia de uno de los imperios criminales más temidos de Colombia: el Cartel del Norte del Valle. Su historia, marcada por violencia, riqueza y transformación física, tiene un nuevo capítulo luego que el  capo quedó en libertad en Estados Unidos tras un acuerdo con la justicia de ese país, convirtiéndose en testigo protegido con nueva identidad.

De los caballos al narcotráfico

Nacido en Palmira, Valle del Cauca, en 1963, Ramírez Abadía inició su carrera criminal en los años 80 bajo la tutela del Cartel de Cali, dirigido por los hermanos Rodríguez Orejuela. Su talento para los negocios ilícitos y su obsesión por el control lo llevaron a convertirse en uno de los principales operadores del Cartel del Norte del Valle tras la fragmentación de su organización madre.

Alias ‘Chupeta’ manejaba sofisticadas redes de laboratorios de cocaína y rutas internacionales hacia México, donde formó una alianza estratégica con el Cartel de Sinaloa y el «Chapo Guzman». En ese contexto, su influencia creció al punto de ser considerado uno de los capos más poderosos de su generación.

El maestro del disfraz

Luego de enfrentamientos con la justicia colombiana, Ramírez Abadía se entregó en 1996, pero fue liberado en 2004 tras cumplir solo una fracción de su condena gracias a beneficios judiciales. Luego huyó a Brasil y se sometió a múltiples cirugías estéticas para alterar su rostro de forma drástica. Estas intervenciones, que incluyeron cambios en su mandíbula, pómulos y nariz, transformaron su apariencia al punto de hacerlo irreconocible.

Sin embargo, en 2007, una operación internacional liderada por autoridades brasileñas, con tecnología de reconocimiento de voz, logró ubicarlo y capturarlo en São Paulo. Su extradición a Estados Unidos en 2008 marcó el inicio de una nueva etapa en su vida.

La transformación de alias «Chupeta» y los lujos de sus hijos

Condena y colaboración con la justicia

En agosto de 2023, un tribunal de Nueva York lo condenó a 20 años de prisión por cargos de narcotráfico, homicidio y lavado de activos. En Estados Unidos se convirtió en informante en casos de alto perfil, incluido el juicio contra Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán, lo posicionó como un testigo clave para las autoridades estadounidenses.

‘Chupeta’ proporcionó información detallada sobre rutas, socios y operaciones del narcotráfico, contribuyendo a desmantelar estructuras criminales y a la condena de líderes del Cartel de Sinaloa. Su cooperación resultó tan valiosa que las autoridades accedieron a reducir significativamente su pena.

Desde su sentencia, Ramírez, según las autoridades estadounidenses, centró sus esfuerzos en colaborar con la justicia de ese país proporcionando información clave sobre narcotraficantes colombianos y mexicanos. Durante esta cooperación, admitió haber ordenado  y en algunos casos ejecutado más de 150 asesinatos A través de sus abogados, ofreció información sobre Joaquín ‘el Chapo’ Guzmán, cabecilla del cartel de Sinaloa, como  rutas de tráfico, nombres de socios y detalles sobre reuniones de alto nivel entre los principales cárteles.

Libertad bajo protección

A mediados de octubre de 2024, Ramírez Abadía recuperó la libertad en Estados Unidos bajo el programa de protección de testigos. Según fuentes judiciales, fue trasladado junto con su familia a una ubicación secreta y recibió una nueva identidad. Como parte del acuerdo, se comprometió a no reincidir en actividades ilícitas, bajo estricta vigilancia del Departamento de Justicia.

Por su cooperación, recibió protección bajo un programa especial para testigos del Departamento de Justicia de Estados Unidos, que incluye una nueva identidad y reubicación en una zona segura. Para mantenerse dentro del programa y conservar los beneficios otorgados, ‘Chupeta’ debió comprometerse a no reincidir en actividades delictivas.

Durante los últimos 16 años, el capo del Cartel del Valle estuvo recluido en una cárcel  en Estados Unidos.

Las Caletas de dinero

Durante su apogeo, alias ‘Chupeta’ acumuló una fortuna inimaginable, escondiendo millones de dólares en caletas que en algunos casos se deterioraron al ser devorados por insectos.

En enero de 2007, en la ciudad de Cali se encontraron cuatro caletas de dinero propiedad de Chupeta: Una con 21 millones de dólares, otra -la más grande- con 68 millones y otras dos con $17 millones de dólares cada una. Por lo menos 2 millones de dólares había sido comidos por gorgojos. En el Barrio Prados del Norte de la ciudad de Cali también se encontraron 309 lingotes de oro con un valor de 6.3 millones de dólares.

Las autoridades colombianas aprovecharon parte de estos recursos incautados, pero su figura quedó inmortalizada como símbolo de la opulencia y el terror de la era de los grandes capos.

El hombre detrás de las cirugías

Alias «Chupeta» tenía gran éxito con las mujeres, por su gran atractivo y buen gusto por la ropa de marca y excentricas joyas , se dice que entre sus conquistas estan varias reinas de belleza y niñas de la sociedad.

Pese a su transformación física, ‘Chupeta’ es un personaje que no se puede borrar de la memoria colectiva. Representa la capacidad de reinvención de un hombre que desafió los límites del crimen organizado y ahora, protegido por la justicia estadounidense, buscará rehacer su vida en el anonimato.

El caso de Ramírez Abadía reabre el debate sobre los beneficios otorgados a narcotraficantes que colaboran con las autoridades, mientras las víctimas de sus delitos siguen exigiendo justicia en Colombia.

¿Quién es alias “Chupeta”, el capo sentenciado a 20 años de cárcel por hablar contra el “Chapo” Guzmán en EEUU?

Juan Carlos Ramírez Abadía, conocido como alias Chupeta, es uno de los narcotraficantes más recordados en la historia de Colombia. Nació el 19 de febrero de 1963 en Palmira, Valle del Cauca, y fue miembro destacado del Cartel del Norte del Valle, una de las organizaciones criminales más poderosas de su época. Antes, tuvo vínculos con el Cartel de Cali, liderado por los hermanos Gilberto y Miguel Rodríguez Orejuela.

Una ambición temprana y despiadada

Desde joven, Ramírez Abadía dejó claro su deseo de acumular riqueza. Estudió ingeniería industrial en la Universidad Javeriana de Cali, donde solía declarar que, si no lograba un millón de dólares antes de los 30 años, se quitaría la vida. Cumplió esa meta con creces: a los 33 años, ya contaba con una fortuna de 20 millones de dólares, múltiples negocios legales como criaderos de caballos, constructoras y agencias de viajes, y una extensa red de propiedades en Bogotá, Cali y Cartagena.

Considerado atractivo y elegante, alias Chupeta era reconocido por su ropa de marca, joyas y su pasión por los caballos de paso fino, afición que desarrolló mientras trabajaba para Iván Urdinola Grajales, otro destacado narcotraficante. Su habilidad para los negocios lo llevó a independizarse y crear su propio imperio del narcotráfico, que incluía laboratorios de procesamiento de cocaína y rutas innovadoras para su transporte.

El ascenso en el Cartel del Norte del Valle

Aunque inicialmente trabajó bajo las órdenes de Orlando Henao Montoya en el Cartel del Norte del Valle, Chupeta rápidamente escaló posiciones, convirtiéndose en una figura autónoma con cuatro oficinas de cobro y cerca de 300 hombres bajo su mando. Su crueldad quedó evidenciada en decisiones como el asesinato de su antiguo socio, Juan Carlos Ortiz Escobar, y la tortura y ejecución de Luis «Tocayo» Ocampo, siempre con el aval de su socio Wilber Alirio Varela, alias Jabón.

Ramírez Abadía fue capturado en Brasil en 2007 y extraditado a los Estados Unidos, donde se declaró culpable y comenzó a cooperar con las autoridades. Su testimonio fue crucial en casos contra otros narcotraficantes, incluido Joaquín Guzmán Loera, alias El Chapo. A cambio, recibió una condena reducida de 20 años y logró que su familia fuera trasladada a Estados Unidos bajo un programa de protección, comprometiéndose a no reincidir en actividades delictivas.

Chupeta ha sido personificado en producciones de televisión y Netflix como El Cartel de los Sapos, donde el actor Juan Pablo Raba lo interpretó bajo el nombre ficticio de «Pirulito». Sus hijos, Juan José, Manuela y Sebastián, heredaron sus extravagancias de carros de alta gama, joyas  y rumbas donde exhibian su estilo de vida opulento en redes sociales, luego de un acuerdo viajaron a Estados Unidos.