«Estoy de luto porque mi última hija se va, estoy triste, vacío, desolado”»: Presidente Petro

Presidente Gustavo Petro reveló que no fue al encuentro de la Corte Suprema de Justicia porque esta de luto: “Mi hija decidió irse y es la última que tenía, estoy triste, vacío, desolado”, así contó el mandatario que su hija se va del país.
 
“»He despedido a muchos de mis hijos, uno tras otro; tuve muchos, y a lo largo de los años fui despidiéndolos. Se fueron dispersando por el mundo porque querían volar. Esa historia del padre que despide a sus hijas siempre llega un día o momento de la separación, de abrir el nido para que vuelen.
Me toca vivirlo ahora porque mi última hija se va, me toca vivir estos dos días que he pasado en medio de mi luto porque mi última hija (Antonella Petro) se va,no me atrevía a realizar actos públicos, incumplí, pero no tenía la fuerza para pararme delante de un auditorio y hablar cuando mi corazón estaba llorando. Mi hija ha sufrido persecución psicológica,  no entiende a su corta edad como a través de las redes, en las esquinas de las calles«.
El presidente Gustavo Petro reveló la razón detrás de su ausencia en eventos oficiales recientes. Durante la posesión de la nueva defensora del pueblo, Iris Marín, en Nuquí, el mandatario compartió un aspecto personal de su vida, expresando su dolor por la partida de su hija Antonella Petro, de 15 años, quien ha decidido irse del país para continuar sus estudios en el extranjero.

Petro, visiblemente afectado, explicó que su ausencia en el encuentro de la Corte Suprema de Justicia en Chocó y en una precumbre campesina en Fusagasugá se debió a su estado emocional.

El presidente también dijo que Antonella ha sido víctima de persecución psicológica, situación que habría influido en su decisión de dejar el país. «Mi hija ha sufrido persecución psicológica, no entiende a su corta edad cómo a través de las redes, en las esquinas de las calles, se han dirigido hacia ella».

Petro, quien canceló su agenda y se mantuvo alejado de las redes sociales durante el 30 de agosto, finalizó su intervención en Nuquí reconociendo la profunda tristeza que lo embarga en este momento.