El ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, oficializó su renuncia al cargo este 4 de diciembre. La salida del economista, quien asumió el puesto en mayo de 2023, se produjo tras la solicitud directa del presidente, en medio de un contexto de tensiones políticas, investigaciones judiciales y acusaciones sobre presuntas irregularidades relacionadas con la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD).
En su carta de renuncia, dirigida al mandatario, Bonilla expresó su agradecimiento por la confianza depositada en su labor, pero subrayó la necesidad de apartarse para enfrentar las investigaciones como ciudadano, lejos de las presiones y responsabilidades del cargo público. “Me retiro con la frente en alto, confiado en convencer a mis investigadores de que no compré silencios, ni votos de congresistas, ni cupos indicativos, ni cometí delito alguno en provecho personal”, afirmó.
Esta es la carta de renuncia enviada al Presidente Gustavo Petro
GUSTAVO PETRO URREGO
Me permito presentar renuncia irrevocable al cargo de Ministro de Hacienda y Crédito Público de Colombia.
Dije siempre que respeto el trabajo de la Fiscalia y que no usaria mi cargo en el gabinete para defenderme.
Estos duros episodios dejan lecciones sobre el diseño institucional de la Comisión Interpartamentaria de crédito público. Las permanentes dilaciones en el otorgamiento de conceptos, no vinculantes, se prestan a maniobras que dejan al ministro de turno en aprietos.
A través de un mensaje en la red social X, el mandatario expresó:
«Espero su renuncia, no porque crea que es culpable, sino porque lo quieren despedazar por ser leal al programa de gobierno y quieren derribar inconstitucionalmente este gobierno.»
Petro defendió la trayectoria y honestidad de Bonilla, destacando su papel como secretario de Hacienda de Bogotá durante la administración de la Bogotá Humana y como ministro en su gobierno.
Y agregó «El error de Bonilla es la ingenuidad académica, pensar que todos tienen la misma altura intelectual. Por eso desobedeció mi indicación de no confiar en los funcionarios uribistas de minhacienda, que nos hicieron trampas desde el principio, como cuando pagaron con el presupuesto, el déficit de gasolina de Duque, o evaporaron la plata para la universidad pública, o no pusieron los códigos que clasifican los proyectos del gobierno para impedir su presupuestación y que no llegaran los recursos. O cuando sabotearon internamente los giros a los programas de educación pública y transporte cuando los desmenucé en mi decreto de liquidación del presupuesto a principios de año porque yo no quería que volvieran a desaparecer los dineros con destino a los programas del pueblo: durante dos meses no dejaron funcionar el sistema, bloquendo al gobierno, al bloquear el sistema de cómputo de programación del ministerio de hacienda,, mientras la prensa decía que por decretar la liquidación del presupuesto como todos los presidentes lo hacen, pero señalando las partidas concretas del plan de desarrollo aprobado, entonces yo era un dictador»
«El ministro no entregó cupos indicativos a parlamentario alguno, porque yo los denuncié, antes que nadie, y por centenares, y porque había ordenado que no se entregarán desde el primer día de mi gobierno, y porque no se hicieron los giros pretendidos desde la UNGRD, dado que yo mismo pedí la renuncia de Olmedo, el bandido y traidor de los muertos asesinados de la izquierda, por su codicia miserable, y entonces ya fuera del cargo, no alcanzó a realizarlos.
Espero por tanto la renuncia de un gran compañero y profesor honesto, el doctor Ricardo Bonilla, secretario de Hacienda de Bogotá Humana, que la dejó en su mejor momento financiero, y gran ministro de Hacienda, que sacó a Colombia de la recesión por el sobre endeudamiento que dejó Duque.
El escándalo de la UNGRD y los señalamientos contra Bonilla
La solicitud de renuncia llega luego de las declaraciones de María Alejandra Benavides, exasesora del Ministerio de Hacienda, quien vinculó al ministro Bonilla con maniobras dentro del entramado de corrupción que rodea a la UNGRD. Según Benavides:
«Él me usó, él usó el hecho de ser ministro de Hacienda, que a él no le importaba el costo que tenía que pagar. Eso lo necesitaban allá adentro.»
Estas declaraciones, realizadas ante la fiscal María Cristina Patiño, investigadora principal del caso, han intensificado la presión sobre Bonilla, aunque Petro insiste en que su decisión no implica una aceptación de culpabilidad por parte del ministro.