La captura de Luigi Mangione, el joven de 26 años señalado como el principal sospechoso del asesinato del CEO de UnitedHealthcare, Brian Thompson, marca un punto clave en una investigación que ha captado la atención de Estados Unidos. Desde el tiroteo que cobró la vida de uno de los líderes más destacados del sector de seguros, hasta el arresto en un McDonald’s en Altoona, Pensilvania, se detallan los eventos que han llevado al hombre señalado por este crimen a ser arrestado y trasladado a manos de la justicia.
El sospechoso fue arrestado por cargos de posesión de armas en un McDonald’s en la ciudad del centro de Pensilvania después de que un empleado lo reconoció y llamó a la policía.
Mangione fue hallado portando múltiples identificaciones fraudulentas, un pasaporte estadounidense, un arma de fuego al parecer impresa en una impresora 3D y un silenciador «consistente con el arma utilizada en el asesinato».
Un asesinato en el corazón de Manhattan
La mañana del miércoles comenzó como cualquier otra en el bullicioso Midtown de Nueva York. Eran cerca de las 7:00 a.m. cuando Brian Thompson, de 50 años, se dirigía al Hilton Midtown para participar en la conferencia anual de inversores de su compañía. Sin embargo, un atacante acechaba en la penumbra. Vestido con una capucha y una mochila gris, esperó el momento oportuno para acercarse a Thompson y dispararle en la espalda. El impacto inicial hizo que el CEO tropezara y cayera al suelo, pero el atacante se aseguró de completar su macabro acto disparándole nuevamente.
El video de vigilancia capturó al agresor manipulando el arma mientras recargaba. Posteriormente, huyó hacia Central Park, dejando atrás una escena de horror y conmoción. Brian Thompson fue declarado muerto menos de 30 minutos después. Este incidente puso en alerta máxima tanto a las autoridades como a la compañía UnitedHealthcare, líder en seguros médicos y conocida por manejar programas gubernamentales como Medicare.
Una investigación compleja
Las amenazas previas contra ejecutivos de alto nivel en UnitedHealthcare ofrecieron una pista inicial. Aunque no había menciones directas a Thompson, la policía comenzó a considerar un posible móvil relacionado con su liderazgo en una de las corporaciones más influyentes del sector.
Las primeras pruebas físicas recuperadas incluían un cartucho con inscripciones como “retrasar” y “deponer”, lo que sugería un mensaje dirigido hacia la industria corporativa. Mientras tanto, el análisis de vigilancia ayudó a las autoridades a identificar a un hombre que entró a la estación de autobuses del puente George Washington sin registrarse como pasajero en los sistemas oficiales.
El sospechoso y su captura
Luigi Mangione, nacido en Maryland y con una última dirección conocida en Honolulu, Hawái, se convirtió en el principal sospechoso. Mangione portaba varias identificaciones falsas y una pistola casera conocida como “arma fantasma”, que carecía de número de serie y había sido posiblemente impresa en una impresora 3D. Además, tenía consigo un silenciador que coincidía con el arma usada en el asesinato.