Así fue la recaptura en Portugal del zar del contrabando Diego Marín, alias ‘El Pitufo’

Alias el Pitufo, Zar del Contrabando

En una operación conjunta entre autoridades portuguesas, españolas y colombianas, Diego Marín Buitrago, conocido como alias El Pitufo, el mayor contrabandista de Colombia, fue recapturado en Portugal tras haber huido de España. Marín, señalado de ser el cerebro detrás de un entramado criminal que conectaba el contrabando con redes de corrupción y narcotráfico, había escapado aprovechando un beneficio judicial que le concedió libertad provisional mientras se concretaba su extradición a Colombia.

La noticia de su captura fue confirmada por la Policía Nacional de Colombia, el general William René Salamanca, recibió la comunicación oficial de las autoridades españolas. «Con su recaptura, el proceso de extradición que estaba avanzado deberá reiniciarse desde cero», indicó una fuente cercana a la investigación.

El hombre detrás del contrabando

Alias El Pitufo, también conocido como Hugo o El Señor, es un personaje clave en el mundo del contrabando. Controlaba el ingreso de mercancías ilegales a Colombia a través de los puertos de Cartagena y Buenaventura, con productos como textiles, calzado y cigarrillos provenientes principalmente de China. Las autoridades han señalado que las ganancias obtenidas del contrabando eran invertidas en bienes raíces y empresas en Miami.

En el marco de las investigaciones contra este entramado criminal, el presidente Gustavo Petro lo calificó como el gran «zar del contrabando» y destacó que este negocio ilegal ha sido «la bisagra entre grandes poderes políticos, estatales y el narcotráfico durante décadas, arruinando la industria nacional». Petro insistió en la importancia de desentrañar las conexiones de corrupción que facilitaban estas actividades.

La conexión política y la corrupción

El nombre de Diego Marín salió a relucir en el proceso judicial contra Ricardo Orozco Baeza, alias El Bendecido, otro de los grandes operadores del contrabando en Colombia. Según las investigaciones, Marín no solo lideraba la operación logística del contrabando, sino que tenía conexiones con funcionarios públicos, agentes de la policía aduanera y posiblemente políticos de alto rango.

En septiembre, el presidente Petro afirmó haber conversado con su homólogo español, Pedro Sánchez, para acelerar la extradición de Marín. Sin embargo, el proceso se complicó debido a que Marín tiene doble nacionalidad, lo que permitió a su defensa argumentar que debía ser juzgado en España. Su fuga solo incrementó las tensiones en torno al caso.

Un golpe al contrabando internacional

Diego Marín había sido capturado originalmente en abril de 2024 en Valencia, España. Desde entonces, su extradición a Colombia se convirtió en un proceso tortuoso que exponía las dificultades legales y diplomáticas inherentes a los casos de doble nacionalidad. Su reciente recaptura en Portugal es un triunfo para las autoridades, pero también marca el inicio de un nuevo capítulo en la lucha por desmantelar una red que ha operado con impunidad durante años.

Ahora, Marín será trasladado a España, donde deberá responder por su fuga y esperar la reactivación de su proceso de extradición a Colombia. Mientras tanto, las autoridades esperan que su colaboración pueda destapar las conexiones de corrupción que permitieron su operación por décadas.