La Iglesia católica , a través de Monseñor Héctor Fabio Henao, se sumó a los llamados para que la insurgencia del ELN realice verdaderos gestos para alcanzar la paz.
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El mensajes de la Iglesia católica se conoció luego de que esa insurgencia aceptara el secuestro del militar Libey Danilo Bravo en Arauca y que el propio Presidente Gustavo Petro, afirmara que «estos hechos sabotean cualquier posibilidad de paz».
Incluso, el Jefe de Estado comentó que los «hechos de violencia contra la Fuerza Pública y los que día a día padecen las comunidades no pueden tener cabida en nuestra sociedad.
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El suboficial del Ejército Libey Danilo Bravo, fue secuestrado el pasado 14 de febrero en el municipio de Arauquita y dìas después el ELN se reivindicó el secuestro.
