Urge Protección de la Salud Mental y Emocional de Niñas, Niños, Adolescentes y Jóvenes Emberá en Chocó

En las últimas tres semanas, la comunidad Emberá en Bojayá, Chocó, ha sido golpeada por la tragedia de cuatro suicidios y varios intentos de suicidio en su territorio. En un lamentable suceso, una niña menor de edad y tres jóvenes de las comunidades Villa Hermosa, Playita y Unión Baquiaza, del resguardo Opogadó-Doguadó, tomaron la fatal decisión de acabar con sus vidas. Estos hechos, según la Defensoría del Pueblo, están estrechamente relacionados con los efectos del conflicto armado que ha marcado el territorio desde hace años.

El sufrimiento causado por la disputa entre los grupos armados ilegales, como las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC) y el Ejército de Liberación Nacional (ELN), ha causado estragos no solo en la seguridad física de los habitantes de Bojayá, sino también en su salud mental y emocional. Durante el primer semestre de 2024, ya se registraron seis muertes por suicidio, incluyendo a tres niñas, un niño y dos jóvenes de varias comunidades indígenas bojayaseñas.

La Defensora del Pueblo, Iris Marín Ortiz, expresó su profunda preocupación por la creciente ola de suicidios y la desesperanza que afecta a los niños y jóvenes en la región: “¿Cómo es posible que niñas, niños y jóvenes en el Chocó opten por la muerte y no por la vida? El Gobierno debe garantizar el derecho al buen futuro para ellas y ellos, especialmente en aquellas zonas que día a día padecen el conflicto armado. Las comunidades étnicas en el departamento del Chocó están cansadas de la injerencia de los grupos armados ilegales. Es hora de que estos grupos tomen conciencia de los impactos devastadores que su comportamiento tiene en las generaciones presentes y futuras del país”.

Frente a esta alarmante situación, la Defensora ha subrayado la necesidad urgente de fortalecer los programas de apoyo a la salud mental, haciendo énfasis en las terapias de sanación étnico-espirituales, que combinan los saberes ancestrales de la comunidad con el apoyo de psicólogos y trabajadores sociales. «Es crucial destinar recursos para que estas iniciativas cuenten con la articulación necesaria para prevenir más muertes», señaló Ortiz.

La Defensoría del Pueblo también recordó la existencia de la Alerta Temprana 016 de 2021, emitida para la cabecera municipal de Bojayá, 12 corregimientos, un consejo comunitario y 15 resguardos indígenas, así como los municipios de Vigía del Fuerte y Medio Atrato. Esta alerta contenía 29 recomendaciones para salvaguardar los derechos a la vida, la libertad, la integridad y la seguridad de los pobladores, las cuales hasta la fecha no han sido implementadas con la urgencia que la situación demanda.

La Defensoría hace un llamado a los entes gubernamentales para que den cumplimiento inmediato a las recomendaciones de carácter preventivo, con el fin de que se garantice la protección de la vida de las niñas, niños, adolescentes y jóvenes, quienes, en medio del conflicto, han llegado a ver el suicidio como la única salida posible.

La situación en el Chocó exige acción inmediata para frenar esta crisis de salud mental y emocional que está cobrando la vida de las nuevas generaciones en el corazón del conflicto armado en Colombia.