La Policía Metropolitana de Bogotá investiga la muerte de cuatro miembros de una misma familia en la localidad de Puente Aranda. Al parecer, un hombre habría asesinado a su esposa, a sus dos hijos menores de edad, y luego procedió a suicidarse.
En el barrio Villa del Rosario, en la localidad de Puente Aranda, Bogotá, una tragedia familiar sacudió a la comunidad. Cuatro miembros de una misma familia fueron encontrados muertos en su hogar, en lo que parece ser un caso de asesinato seguido de suicidio. La Policía Metropolitana y el CTI de la Fiscalía están llevando a cabo una minuciosa investigación para esclarecer los detalles de este trágico incidente.
Descubrimiento de la Escena
El pasado 22 de mayo, la familia había sido reportada como desaparecida. Fue el hermano de la mujer, Marcela, quien alarmado por la ausencia prolongada, decidió visitar la vivienda. Al llegar, se encontró con una escena espeluznante: los cuerpos sin vida de Marcela, su esposo y sus dos hijos menores de edad. Inmediatamente, notificó a las autoridades, quienes se desplazaron al lugar para iniciar la investigación.
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Inspección Inicial
El general José Daniel Gualdrón, comandante de la Policía de Bogotá, informó que los cuerpos de los menores, de 15 y 17 años, y de Marcela, de 48 años, no presentaban signos de violencia externa. Los menores fueron encontrados arropados en sus camas, cada uno en su habitación, y Marcela en su dormitorio principal. A diferencia de ellos, el cuerpo del hombre, de 51 años, fue hallado a los pies de la cama matrimonial con una herida de arma blanca en el cuello, la cual se presume fue autoinfligida.
Las autoridades manejan una hipóteis de la causa de muerte de Marcela y sus hijos podría haber sido envenenamiento, dado que no había signos de lucha ni heridas visibles. Esta teoría cobra fuerza debido a la disposición de los cuerpos y la ausencia de violencia física. El hombre, quien aparentemente se quitó la vida con un arma blanca, presentaba una herida en el cuello.
Las declaraciones de una vecina, estilista de profesión, aportaron detalles sobre la vida de Marcela y su familia. Marcela, odontóloga de 48 años, había mencionado a la vecina que padecía un tumor cerebral, lo que le impedía trabajar. Esta situación había afectado la estabilidad económica de la familia, ya que el esposo era el único sostén económico. La presión financiera y la enfermedad de Marcela podrían haber contribuido al trágico desenlace.
La noticia conmocionó a los residentes de Villa del Rosario y a la comunidad en general. Las primeras imágenes del lugar muestran una vivienda común, ahora centro de una tragedia que pocos podrían haber anticipado. Los investigadores del CTI están recopilando todas las pruebas posibles para esclarecer los motivos que llevaron a esta fatal decisión.
Las autoridades aún no han revelado las identidades completas de las víctimas.
