En El Plateado, un corregimiento ubicado en la ruralidad de Argelia, Cauca, la situación se ha tornado crítica. Tras el reciente despliegue de 1.400 efectivos de las Fuerzas Militares en la región, el presidente Gustavo Petro ha autorizado bombardeos contra las disidencias armadas aliadas a ‘Iván Mordisco’, lo que ha intensificado un conflicto que ya ha cobrado un alto costo en la población civil.
La mañana de hoy, la calma fue rota por una explosión que dejó un saldo preliminar de entre 14 y 17 heridos, todos civiles. La explosión, aparentemente provocada por un dron de los disidentes, se produjo en un momento en que la comunidad había presionado a los militares a concentrarse en el centro del pueblo, convirtiendo la plaza en un foco de tensión.
“El EMC al bombardear población civil nos obliga, por el principio de proporcionalidad, a bombardear sus fuerzas”, declaró Petro, añadiendo un mensaje claro a los disidentes: “Venzan la codicia y hagan la paz en favor del pueblo colombiano”.
El Plateado, conocido como un fortín de las disidencias, es un estratégico corredor de narcotráfico que conecta las zonas de producción de coca y marihuana en Cauca y Nariño con las costas del Pacífico. En este contexto, la comunidad se encuentra atrapada entre las balas de un conflicto que parece no tener fin y un gobierno que busca desarticular a las organizaciones ilegales.