Las Razones Detrás de la Renuncia de Salvatore Mancuso y 13 Exjefes Paramilitares como Gestores de Paz

En una carta enviada al presidente Gustavo Petro, los excomandantes de las extintas Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) denunciaron incumplimientos por parte de la Oficina del Alto Comisionado para la Paz y anunciaron su retiro del rol de Gestores de Paz.

Mediante una carta extensa y con tono crítico, Salvatore Mancuso y otros trece exjefes paramilitares informaron al presidente Gustavo Petro su decisión de renunciar al encargo de Gestores de Paz, una figura que les fue conferida en noviembre de 2024 mediante la resolución 453.

En el documento, los excomandantes de las Autodefensas Campesinas de Colombia denunciaron “el reiterado incumplimiento de los compromisos” por parte de la Oficina del Alto Comisionado para la Paz (OCCP), así como la “abierta insubordinación” frente a las órdenes presidenciales, lo que minó afirman la confianza en ese canal institucional.

“Nos dirigimos a Usted con el mayor respeto para comunicarle nuestra decisión de suspender el encargo conferido, ponerlo a su entera disposición, y en consecuencia, suspender las relaciones con la Oficina del Consejero Comisionado para la Paz (OCCP)”, dice la carta firmada por los exparamilitares.

Entre las principales quejas, señalaron que la OCCP no cumplió con su promesa de instalar una mesa para el cierre del proceso de Ralito ni mostró voluntad política para atender el componente de justicia transicional. Según afirman, sus funciones como Gestores de Paz terminaron reducidas a un “gesto simbólico”; A pesar de su renuncia al encargo, los firmantes manifestaron su disposición de mantener el compromiso con la paz, la verdad y la reparación a las víctimas, y propusieron abrir un canal de diálogo directo con el presidente Gustavo Petro, al margen de la OCCP.

“Señor Presidente: reiteramos nuestro reconocimiento a su liderazgo y nuestra voluntad inquebrantable de continuar nuestra inclusión en la Agenda de Paz Total, bajo un nuevo diseño institucional, que supere las contradicciones entre usted y su delegación de paz”, plantean en otro apartado de la misiva.

Finalmente, solicitaron al jefe de Estado que defina una fecha, hora y lugar para discutir directamente el rumbo del proceso, señalando que aún es posible “pisar el acelerador y consolidar la paz” o bien “reconfigurar los actores y escenarios que han fallado”