
En una operación de alto impacto, tropas del Ejército Nacional localizaron y destruyeron cerca de 46 artefactos explosivos improvisados y más de 850 kilogramos de explosivos en la vereda Manzanares, municipio de El Tarra, Norte de Santander.
El material, presuntamente instalado por integrantes del Bloque Magdalena Medio, Estructura 33, representaba un grave riesgo para la comunidad y la Fuerza Pública.
La acción se llevó a cabo en el marco de la Operación Catatumbo, mediante labores de inteligencia militar que permitieron ubicar los explosivos cerca de una vía terciaria y algunas viviendas. La presencia de estos artefactos constituye una violación flagrante a los derechos humanos y una infracción al derecho internacional humanitario.
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Para evitar afectaciones a la población civil, el Ejército Nacional aplicó estrictos protocolos de seguridad en la destrucción del material, asegurando la zona con equipos especializados en explosivos y demoliciones. Gracias a esta intervención, se logró mitigar una amenaza latente y garantizar la protección de los habitantes del sector.