Gustavo González Ruiz, esposo de la congresista Karen Manrique, se encuentra siendo investigado en el escándalo de corrupción en la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD). La Fiscalía General de la Nación lo investiga por su presunta participación en el desfalco de la entidad, uno de los casos más sonados de corrupción reciente que involucra a figuras clave del gobierno, el Congreso y contratistas.
La investigación contra González Ruiz surge tras el testimonio de Sneyder Augusto Pinilla Álvarez, exsubdirector de Manejo de Desastres de la UNGRD, quien amplió su declaración ante la Fiscalía. Pinilla, uno de los principales implicados en el escándalo, detalló presuntas irregularidades y prácticas corruptas dentro de la entidad, lo que llevó a que el esposo de la congresista Karen Manrique fuera llamado por el ente acusador. En consecuencia, la Fiscalía ha solicitado a la Corte Suprema de Justicia la incorporación de estos testimonios en la investigación que involucra a Manrique, quien también es señalada por su posible relación con el entramado de corrupción.
González Ruiz es un empresario con una reconocida trayectoria en la región, en el ámbito de la construcción. Es gerente de Grucori SAS, empresa especializada en obras civiles, infraestructura Geotecnia, estructuras, vivienda, revegetalizacion, reforestación, obras de arte, construcción de vías.
Sin embargo, la relación de González con los contratos de la UNGRD ha generado inquietudes. La fiscalía lo ha incluido en la lista de investigados, considerando su posible implicación en el direccionamiento de contratos. Su esposa, Karen Manrique, quien como congresista es investigada por la Corte Suprema de Justicia por presuntamente influir en decisiones legislativas y de contratación en la UNGRD.
Por otro lado, la congresista Karen Manrique ha estado en el centro de la polémica, tras las acusaciones del exdirector de la UNGRD, Olmedo López, quien la señala como una de las personas encargadas de direccionar contratos por 92 mil millones de pesos, fondos que habrían sido utilizados para beneficiar a varios congresistas y personajes cercanos al gobierno de Gustavo Petro. Según las denuncias, Manrique estaría vinculada a un entramado de corrupción que incluye a otras figuras de la política colombiana.
Karen Manrique, de 35 años, es una joven representante a la Cámara por el departamento de Arauca, que llegó al Congreso en el marco de las 16 curules de paz derivadas del acuerdo de La Habana. Antes de su ascenso político, Manrique trabajó como asesora del representante liberal Nervado Rincón, quien fue destituido por celebrar contratos de manera indebida.
El escándalo ha puesto en jaque tanto a la congresista como a su esposo, quienes ahora enfrentan una serie de investigaciones judiciales. En medio de la controversia, Karen Manrique ha negado las acusaciones en su contra, asegurando que no ha participado en actividades ilegales y que su gestión está enfocada en el bienestar de las víctimas del conflicto armado. Sin embargo, la Fiscalía continúa con la recolección de pruebas y la ampliación de las indagaciones, mientras los ojos del país siguen atentos a los avances de este complejo caso de corrupción.
Sobre el esposo de la congresista, “la Fiscalía indagará sobre la eventual responsabilidad de Gustavo González Ruiz, esposo de la mencionada congresista, en los hechos de corrupción detectados”.
