El abogado Criollo en entrevista con Focus Noticias, afirmó que la menor fue usada como una herramienta clave para ejecutar el plan. Según explicó, la adolescente pasó la noche anterior al crimen en el apartamento de Juan Felipe, una circunstancia que, en palabras del defensor, genera «serias suspicacias». Declaraciones de la menor en el proceso indican que su presencia en el lugar habría sido resultado de «instrucciones concertadas» con personas involucradas en el caso.
El abogado dice que la menor de 15 años se quedó la noche anterior en el apartamento de Juan Felipe Rincón, que no entiende como «instrumentalizan a una menor para que pase la noche con Juan Felipe y luego retenerlo, esta situación genera suspicacia. Hay unas entrevistas de la menor en el proceso que dice que por instrucciones, concertadas por estas personas ella fue hasta el apartamento de Juan Felipe«.
Además de la existencia de un perfil de Instagram, creado pocos días antes de la primera interacción entre la supuesta menor y Juan Felipe. El perfil, inicialmente identificado con el nombre de Katherine Sotelo Torres, hermana de Andrés Camilo Sotelo, principal acusado en el caso, fue posteriormente modificado para presentarse como María José. Para el abogado, esta manipulación digital plantea dudas sobre quién realmente se comunicaba con la víctima y los fines detrás de esta interacción virtual.
El papel de Andrés Camilo Sotelo y el desenlace fatal
Se conoció un nuevo video donde se evidencia el enfrentamiento que culminó en el asesinato de Juan Felipe. Imágenes de cámaras de seguridad muestran a Sotelo y otro individuo agrediendo al joven con la cacha de un arma, mientras el escolta de Juan Felipe, el patrullero Sergio Felipe Rico, apartaba a dos mujeres para defender a su protegido.
En un momento clave del video, se observa al escolta retroceder mientras apunta con su arma hacia los agresores, y luego Juan Felipe cae al suelo. Aunque los registros muestran un escenario caótico, el momento exacto del disparo fatal no es claro. Casquillos de dos armas diferentes fueron encontrados en el lugar: uno pertenece a la pistola de dotación de Rico, y el otro a un revólver presuntamente inhabilitado, entregado posteriormente por Katerin Sotelo.
Investigación y controversias
El dictamen de Medicina Legal concluyó que la muerte de Juan Felipe fue causada por un impacto de bala en el tórax, que ocasionó graves daños pulmonares. Sin embargo, el proyectil que lo mató no fue recuperado, complicando el análisis forense. Además, la presencia de diez casquillos de dos armas diferentes en la escena alimenta la hipótesis de un intercambio de disparos.
Frente a la pregunta de quien disparó si fue el escolta de Juan Felipe Rincón, el abogado respondió «no lo descartamos, a este punto hay una investigación contra un ciudadano, pero si la justicia que hay más responsables independiente quien sea que asuma las consecuencias será la justicia la que tome las deciciones que esclarezcan el caso«.
El abogado Criollo no descartó que el escolta pueda ser considerado responsable, pero enfatizó que el propósito de la defensa del general Rincón es garantizar que todas las responsabilidades, «independientemente de quién sea el culpable», sean esclarecidas por la justicia.
Las revelaciones sobre la posible instrumentalización de una menor y la manipulación digital añaden una capa de complejidad al caso, elevando cuestionamientos éticos sobre el uso de menores. La Fiscalía, por su parte, tiene la tarea de determinar quién disparó el arma fatal y el grado de responsabilidad de cada uno de los involucrados.