“Mi credencial dice acceso total y un guardia de seguridad de esos que quiere hacerse el importante lo desconoció. Le insistí que podía entrar y me empujó. Y ahí se armó un tumulto ridículo e injusto donde atropellaron niños. Yo a nadie golpeé, yo me defendí, miren el video donde se ve que somos ultrajados”, afirmó Jesurún visiblemente molesto.
Videos en redes sociales muestran al hijo de Jesurún forcejeando con personal del estadio frente a una puerta, mientras el presidente de la FCF es llevado por otra persona. Según el reporte de la Policía de Miami-Dade, Jesurún empujó a un guardia de seguridad que había puesto una mano sobre él para detenerlo. Su hijo, por su parte, es acusado de sujetar a un guardia por el cuello, tirarlo al piso y agredirlo físicamente.
Tanto Ramón Jesurún como su hijo enfrentan cargos de agresión. El presidente de la FCF tiene tres cargos graves, mientras que su hijo, de 43 años, enfrenta los mismos cargos más un delito menor. Ambos fueron liberados bajo fianza y deberán presentarse ante la corte el 14 de agosto.
Declaración de la FCF
La Federación Colombiana de Fútbol publicó un comunicado explicando su versión de los hechos. Según el documento, los empleados de seguridad privada del estadio impidieron el acceso oportuno a la gramilla a la mayoría de los integrantes de la delegación colombiana, a pesar de estar debidamente identificados. Esto generó reclamos vehementes por parte de algunos, incluido un familiar de Jesurún.
El comunicado añade que la respuesta de uno de los guardias, quien realizó una maniobra con la mano, desató las agresiones y momentos de alta confusión. El presidente de la FCF, impulsado por su instinto paternal, se apresuró a reclamar lo sucedido, pero terminó desbordado por la situación.
Repercusiones en la Organización del Evento
El caos en el ingreso al Hard Rock Stadium retrasó el inicio de la final de la Copa América por más de una hora. La Policía de Miami-Dade detuvo a 27 personas y expulsó a decenas que irrumpieron sin boleto al recinto. Este episodio ha generado críticas hacia la organización del evento y ha sembrado dudas de cara al Mundial 2026, que tendrá a Estados Unidos como uno de los países anfitriones junto con Canadá y México.
Conmebol y las autoridades locales se han señalado mutuamente por las fallas en la organización y la seguridad del evento. La alcaldesa de Miami-Dade, Daniella Levine Cava, aseguró que la organización corre por cuenta de Conmebol, mientras que desde el Hard Rock Stadium se habló de un trabajo conjunto entre las autoridades del campo y las confederaciones.
No se tienen responsables del caos en el partido de la final de la Copa América entre Argentina y Colombia que demoró el comienzo del encuentro por más de una hora y que, provocó que personas sin boleta ingresaran al estadio.
La próxima audiencia de Jesurún y su hijo está programada para el 14 de agosto, donde deberán comparecer ante la corte. Mientras tanto, el presidente de la FCF se enfrenta a un futuro incierto tanto en su cargo como en su capacidad para viajar a Estados Unidos, un factor crucial dado que el país será uno de los anfitriones del próximo Mundial.
El desenlace de este caso podría tener repercusiones significativas no solo para Jesurún y su familia, sino también para la Federación Colombiana de Fútbol