La visita de Pedro Alberto Noriega, un turista mexicano que llegó a Colombia con su familia para celebrar las festividades decembrinas, dio un giro inesperado al desaparecer por dos días en Bogotá. Tras abordar un servicio de transporte privado desde Usaquén hacia su hotel, su rastro se perdió. El hombre no tiene recuerdos claros de lo ocurrido.
El sábado 4 de enero de 2025, Noriega y su primo, Camilo Pedraza, disfrutaban de la noche en la terraza de BrewPub, un reconocido establecimiento en Usaquén. Cerca de las 10:53 p.m., Pedro pidió un vehículo de una plataforma de transporte para regresar al Hotel Santafé Boutique, donde se hospedaba junto a su familia. Pedraza lo acompañó hasta una camioneta Volkswagen T-Cross de vidrios polarizados.
Al día siguiente, la preocupación se apoderó de su familia cuando Pedro no apareció en el hotel. La incertidumbre aumentó cuando recibieron mensajes confusos de Pedro a través de WhatsApp. Según el primo, el mexicano escribió que estaba «subiendo Monserrate con unos amigos» y, minutos después, aseguró que «desayunaba en un restaurante». La incoherencia de los mensajes encendió las alarmas.
Sospechas de un paseo millonario
Ante la desaparición, la familia contactó a la Policía, que sugirió la posibilidad de que Pedro hubiera sido víctima de un «paseo millonario», una modalidad de robo en la que las víctimas son retenidas para realizar retiros bancarios. Como precaución, bloquearon de inmediato todas las cuentas financieras de Noriega.
El regreso sin memoria
El domingo por la noche, la angustia llegó a su fin cuando un taxi se detuvo frente al hotel con Pedro a bordo. El conductor explicó que lo había recogido en Chapinero. Sin embargo, el mexicano estaba visiblemente confundido. Según relató, recordaba vagamente haberse encontrado con «amigos de Alemania», pero no tenía claridad sobre lo que sucedió durante esos dos días.
Los exámenes toxicológicos resultaron negativos, los médicos advirtieron que si había sido víctima de escopolamina, los rastros de la sustancia probablemente ya habrían desaparecido.
Aunque Pedro regresó con vida, la falta de claridad sobre lo ocurrido y las lagunas en su memoria mantienen abiertas las preguntas sobre su misteriosa desaparición.
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