Contraloría identifica 76 Elefantes Blancos y Proyectos Críticos en Caldas por $556,931 millones

Carlos Mario Zuluaga, Vicecontralor en funciones de Contralor General y otros funcionarios
Carlos Mario Zuluaga, Vicecontralor en funciones de Contralor General y otros funcionarios

En un informe revelador, la Contraloría General de la República ha señalado la existencia de 76 proyectos problemáticos en el departamento de Caldas, con un valor total estimado de $556,931 millones. Estos proyectos, lejos de cumplir su propósito de servir a las comunidades y garantizar sus derechos, se han convertido en lo que se conoce como «Elefantes Blancos» y «Obras Inconclusas».

Entre estos proyectos, destacan 12 que han sido catalogados como «Elefantes Blancos» o «Obras Inconclusas». Esto se debe a que, a pesar de haber transcurrido un año desde el plazo legal establecido para su liquidación, no han entrado en funcionamiento ni prestan ningún servicio a la comunidad. Entre los ejemplos de estos proyectos se encuentran el macro proyecto San José, la construcción del cable aéreo Yarumos en Manizales y el proyecto del parque lineal de la calle 10 de La Dorada. En conjunto, estos proyectos tienen un valor de $83,886 millones de pesos.

Por otro lado, el informe también resalta la presencia de 58 proyectos críticos en Caldas. Entre ellos, figuran proyectos de gran envergadura como la construcción del aeropuerto de Palestina, la planta de tratamiento de agua residual Los Cámbulos de Manizales y la I.E. Gerardo Arias de Villamaría. Estos proyectos, aunque están en ejecución, presentan problemáticas que han llevado a suspensiones, prórrogas y otras complicaciones en el vínculo contractual, lo que los coloca en riesgo de convertirse en «Elefantes Blancos» o «Proyectos Críticos». Su valor total asciende a $448,745 millones.

La Contraloría ha tomado medidas para abordar estos problemas, incluyendo la participación activa de la ciudadanía en mesas de diálogo con las administraciones locales, contratistas e interventores. El objetivo es que estas partes se comprometan a reiniciar las acciones necesarias para gestionar los terrenos requeridos para la continuación de los proyectos, como en el caso del cable aéreo del sector Los Cámbulos. También se han abordado retrasos en proyectos, como la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales de Los Cámbulos, que se han visto afectados por factores climáticos y problemas técnicos.

Además, la Contraloría está supervisando proyectos para entender mejor los avances y desafíos en su ejecución y ha realizado visitas a proyectos específicos, como el de Aguas de Manizales. En este último caso, se ha encontrado un notorio desfase entre el avance programado y la ejecución real, con una inversión estimada de aproximadamente $133,000 millones y un avance real del 6%, en comparación con el 24% programado.

En un contexto nacional, el informe de la Contraloría también revela que en todo el país existen 2,212 proyectos problemáticos con un valor estimado de $21.01 billones. De estos proyectos, 1,753 continúan activos, ya que no se ha encontrado una solución a los problemas que han impedido su terminación, representando un valor de $15.2 billones.

Además, 1,054 proyectos se han categorizado como «Elefantes Blancos» o «Obras Inconclusas» porque no se han entregado a la ciudadanía un año después de su plazo legal de liquidación, con un valor de $7.02 billones. Por otro lado, 699 proyectos han sido catalogados como «proyectos críticos», con un valor reportado de $8.2 billones, ya que enfrentan problemas que podrían convertirlos en «Elefantes Blancos» o «Proyectos Críticos».

Los departamentos con la mayor cantidad de recursos comprometidos en estos proyectos, según el informe, son Valle del Cauca, Antioquia y Tolima. En términos de la cantidad de proyectos, Cundinamarca encabeza la lista, seguido de Valle del Cauca y Santander.

En resumen, el informe de la Contraloría General de la República subraya la necesidad apremiante de abordar los problemas en estos proyectos, no solo para evitar que se conviertan en «Elefantes Blancos» o «Proyectos Críticos», sino también para garantizar que se cumplan los derechos de las comunidades y que los recursos públicos se utilicen de manera efectiva y transparente.