La Fiscalía General de la Nación pidió preclusión en el caso de la trágica muerte del ingeniero Jorge Enrique Pizano excontroller de la Ruta del Sol y de su hijo Alejandro Pizano Ponce de León.
Este viernes continúa la audiencia de preclusión por la muerte de Alejandro Pizano hijo de Jorge Enrique Pizano, testigo clave en el caso de Odebrecht, su muerte levantó sospechas de que podría haber sido asesinado para silenciar su testimonio.
Jorge Enrique Pizano murió el 8 de noviembre de 2018 en su casa de campo en Subachoque, Cundinamarca. La familia por recomendación de amigos incineró el cadáver.
Su hijo menor Alejando Pizano quien vivía en España, regresó al país junto a su esposa quien estaba embarazada para estar en el sepelio de su padre, luego de la ceremonia la familia fue a la finca, Alejandro ingresó a la habitación donde dos días antes había fallecido el ingeniero y tomó agua de la botella que estaba sobre el escritorio de su padre, sin saber que este liquido contenía cianuro. El joven arquitecto de 30 años murió envenenado a los pocos minutos.
Según la Fiscalía Jorge Pizano falleció de muerte natural, mientras que su hijo Alejandro murió por la ingesta de agua contaminada con el mortal químico, que había sido dejada presuntamente por su padre en el escritorio.
Vea aquí la primera parte de la audiencia:
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«En relación con la trágica muerte de mi hijo, Alejandro Pizano Ponce de León, las autoridades han clasificado su muerte como un homicidio por esclarecer«, dijo en un comunicado su madre al momento de su fallecimiento.
Durante la diligencia el abogado de víctimas Miguel Ángel del Rio, presentó dictámenes forenses, testimonios, mensajes de chat del ingeniero con las periodistas Maria Jimena Dusan y Darcy Quinn, para argumentar que hubo manos criminales detrás de las muertes de Pizano y su hijo Alejandro.
También demostró que se habrían borrado conversaciones del chat de WhatsApp del celular de Pizano, archivos del Ipad y las dudas que se tenían sobre personas que habían entrado a trabajar en los últimos meses con la familia.
Vea las revelaciones hechas en la segunda parte de la audiencia:
Para el abogado también hay dudas y «no se entiende» porque la botella de agua saborizada no tenía huellas, ni rastros de ADN de Alejandro Pizano pero si de su padre, además de una variación o borrado del lote de la botella.
«Eso significa que Jorge Pizano tomó de la botella o antes de mezclar el cianuro, cosa que sería absurda porque después lo que hizo fue irse a afeitar o la tomó después cuando alguna mano criminal puso el cianuro en la botella, pero entonces como podemos explicar que en la boca de la botella no este el ADN de Alejandro que muere precisamente a causa de esto«…
Como es posible que una persona deje preparada la mezcla de cianuro con agua en el escritorio y salga a bañarse, la regla de la experiencia no dice eso, eso es lo que también dice Juanita su hija, el jamás se hubiera metido a bañar después de tomarse algo y deslegitima que él de manera deliberada hubiera querido acabar con su vida«.
Del Rio además refutó la prueba de la presunta compra por parte de Jorge Enrique Pizano del cianuro y la forma como encontraron la bolsa con el peligros químico en la finca de la familia, apoyado en lo que dijo Juanita Pizano hija del ingeniero del momento en que la encontraron.
Un nuevo hallazgo que revela el penalista, es que Juanita Pizano habría puesto su boca sobre la botella de agua saborizada con cianuro y también habría tocado la bolsa con el cianuro encontrada detrás de un minicomponente en la finca, por lo que los rastros de ADN de la bolsa y la botella pertenecería a la joven y no a su padre fallecido.
Para el abogado de víctimas la teoría es que «hubo una actividad criminal por parte de un tercero que puso cianuro en las botellas de agua que normalmente se tomaba Jorge Enrique Pizano y que accidentalmente también se tomó su hijo Alejandro, porque al que querían eliminar era a Jorge Enrique Pizano».
La Fiscalía ha presentado una solicitud de preclusión en el caso de la trágica muerte de Alejandro Pizano Ponce de León, hijo del ingeniero Jorge Enrique Pizano, excontroller de la Ruta del Sol, con la teoría de la Fiscalía, que Jorge Pizano murió de forma natural, por un paro cardiaco cuando se preparaba para tomar el agua con cianuro, mientras que la muerte de Alejandro fue resultado de la ingesta de agua contaminada con este químico letal, líquido dejado en el lugar.
Miguel Ángel del Rio, presentó los testimonios de la viuda de Jorge Pizano y sus hijas, el abogado y la familia buscan evitar el cierre del caso y exigir una investigación más profunda.
La Representante del Ministerio Público solicitó no precluir y continuar investigando las nuevas pruebas, incertidumbre y dudas que se tienen de los hechos relacionados con este doloroso caso.
Es importante mencionar que Jorge Enrique Pizano tenía información confidencial sobre los millonarios sobornos de la multinacional Odebrecht a altos funcionarios, congresistas y políticos. En el momento de su misteriosa muerte, Pizano estaba a punto de ser imputado por la fiscalía durante la administración de Néstor Humberto Martínez, quien era uno de sus mejores amigos. Pizano había informado a Martínez sobre las exorbitantes «coimas» pagadas por la constructora brasileña y las graves irregularidades.
Para marzo de 2024 quedó programada la audiencia donde el juez dará a conocer la decisión en este caso de continuar o no con esta investigación.
¿Quién era Jorge Pizano?
Fue un ingeniero civil, que se desempeñó como Secretario General e Intendente Técnico Operativo de Acueducto Alcantarillado y Aseo, fue gerente de la Empresa de Acueducto y Alcantarillado en Bogotá y se desempeño como Controller del proyecto Ruta del Sol II.
Jorge Enrique Pizano quién tenia mucha información reservada sobre los millonarios sobornos de la multinacional Odebrech a altos funcionarios, congresistas y políticos, el momento de su extraña muerte estaba a punto de ser imputado por la fiscalía en la administración de Néstor Humberto Martínez, quién era uno de sus mejores amigos, cuando se percató de las graves irregularidades le comentó a Martinez de las exorbitantes «coimas» pagadas por la constructora Brasileña.
