Cruce de mensajes entre Presidente Petro y Enrique Vargas Lleras por la Crisis de la EPS SURA
El sistema de salud en Colombia enfrenta una nueva controversia tras las acusaciones del presidente Gustavo Petro contra Enrique Vargas Lleras, hermano del exvicepresidente Germán Vargas Lleras. La salida de la EPS Sura del sistema de salud ha exacerbado las tensiones, situando a Vargas Lleras en el centro de un debate sobre la gestión y transparencia en las Entidades Promotoras de Salud (EPS).
Gustavo Petro utilizó las redes sociales para responsabilizar a Enrique Vargas Lleras de la crisis en el sistema de salud, señalándolo directamente por la salida de Sura. Petro argumentó que la familia Vargas Lleras tenía una responsabilidad significativa en los problemas financieros que afectan a las EPS, particularmente en la Nueva EPS, donde Enrique Vargas Lleras fue miembro de la Junta Directiva.
En su publicación, Petro acusó a Vargas Lleras de ocultar deudas cercanas a los 5 billones de pesos en 2023, sugiriendo una «pérdida inmensa de recursos públicos». Estas acusaciones se intensificaron cuando EPS Sura, con más de 5.3 millones de afiliados, solicitó retirarse del sistema de salud, citando problemas financieros y buscando un desmonte progresivo para asegurar un traslado ordenado de sus afiliados.
La Respuesta de Enrique Vargas Lleras
En respuesta, Enrique Vargas Lleras emitió un comunicado negando rotundamente las acusaciones de Petro. En el comunicado, Vargas Lleras aseguró que durante su tiempo en la Junta Directiva de la Nueva EPS, no se ocultaron deudas ni se realizaron gastos ilegales. Resaltó que todas las operaciones financieras fueron auditadas por firmas internacionales de renombre como Deloitte and Touche y KPMG, las cuales corroboraron la legalidad y transparencia de las mismas.
Vargas Lleras destacó que su participación en la Junta Directiva fue en representación de la Caja de Compensación Familiar CAFAM y que cualquier alegación de ocultamiento de deudas debería ser dirigida a los administradores que estaban al frente de la empresa. Asimismo, insinuó que las acusaciones podrían ser una reacción del gobierno a su oposición a la reforma de salud propuesta por Petro.
La situación se complica aún más con la decisión de EPS Sura de retirarse del sistema de salud para anticiparse a problemas mayores, asegurando un traslado ordenado de sus afiliados y el pago de compromisos con IPS, hospitales y proveedores. Esta decisión se suma a los problemas enfrentados por otras EPS como Compensar y la intervención de Sanitas por parte del gobierno.
El gerente de Sura, Pablo Fernando Otero, también mencionó que se había solicitado a la Superintendencia Nacional de Salud la autorización para un retiro progresivo, un proceso que podría durar 65 días y durante el cual la entidad podría ser intervenida por el gobierno.
