11 de septiembre de 2025

A la cárcel responsable del asesinato del comandante de Policía de Zambrano quien custodiaba el dinero para una entidad bancaria

En atención a los elementos materiales probatorios obtenidos por la Fiscalía General de la Nación, un juez penal de control de garantías impuso medida de aseguramiento en centro carcelario a Brayan Michel Ramírez Suárez, como presunto responsable de causarle la muerte al comandante de la Policía de Zambrano (Bolívar), el subteniente Nicolás Reyes Valencia de 22 años, el pasado 24 de enero.

Es señalado de propinarle cuatro disparos al oficial, quien acompañaba el traslado de $300 millones  para abastecer a una entidad bancaria.

El oficial acompañaba y prestaba seguridad a dos trabajadores de una empresa de valores que llegaron al municipio con una tula de dinero para abastecer a una entidad bancaria. Los hombres se bajaron del helicóptero que los transportaba, el cual aterrizó en la cancha de fútbol del barrio La Esperanza, dialogaron con el oficial y uno de ellos que cumplía el rol de escolta, presuntamente atacó de manera intempestiva al uniformado propinándole cuatro disparos.

Esta persona sería Ramírez Suárez, quien posteriormente le habría arrebatado el arma de dotación al subteniente y exigido a su compañero retornar a la aeronave y despegar para escapar del lugar. Minutos después, la Policía Nacional ubicó el helicóptero en el aeropuerto de Corozal (Sucre) y capturó al señalado agresor.

Durante la audiencia de legalización de captura, Brayan Michel Ramírez Suárez, escolta de una empresa de valores, admitió que le disparó al uniformado en repetidas ocasiones.El escolta de 28 años, se encontraba acompañando la entrega de una remesa dirigida a una entidad bancaria de Zambrano a bordo de un helicóptero, normalmente el personal de la Policía acompañaba el procedimiento, según lo narrado por Ramirez  habría sentido temor al momento en el que el uniformado cargaba su arma para realizar el recibimiento y traslado del dinero, por lo que le disparó al sentirse amenazado.

Por estos hechos, un fiscal de la Seccional Bolívar le imputó los delitos de homicidio y hurto calificado, ambas conductas agravadas. El procesado no aceptó los cargos.