EE.UU. ataca instalaciones nucleares iraníesIrán promete represalias

En una ofensiva que marca un punto crítico en la escalada de tensiones en Medio Oriente, Estados Unidos bombardeó este domingo tres instalaciones nucleares clave en Irán: Natanz, Isfahán y el altamente protegido sitio subterráneo de Fordow. Según el presidente Donald Trump, las instalaciones fueron “totalmente destruidas” en una operación ejecutada con bombarderos B-2 y bombas antibúnker de alta precisión.

El ataque estadounidense se produce en medio del recrudecimiento del conflicto entre Irán e Israel, que ha dejado un saldo incierto de víctimas y provocado la alarma en varias capitales del mundo. En un discurso desde la Casa Blanca, Trump advirtió que podría ordenar nuevos ataques si Irán no “firma la paz”, aunque no precisó qué condiciones implicaría tal acuerdo.

Fordow: el corazón del programa nuclear iraní, golpeado

Imágenes satelitales captadas por la empresa Maxar y analizadas por CNN muestran al menos seis cráteres de gran tamaño en Fordow, una instalación ubicada en las profundidades de las montañas cerca de la ciudad santa de Qom. Este sitio, símbolo del programa nuclear iraní, fue atacado con bombas diseñadas para penetrar estructuras subterráneas altamente reforzadas.

Aunque las autoridades iraníes aún no han revelado el alcance del daño, fuentes estadounidenses aseguran que la operación fue exitosa. Sin embargo, la Agencia Atómica Iraní condenó el bombardeo como una violación del derecho internacional y afirmó que el programa nuclear del país continuará “sin interrupciones”.

Irán: sin señales de retroceso

A pesar de la magnitud del ataque, el gobierno iraní ha respondido con firmeza. Medios estatales citaron fuentes militares que califican la acción como un “acto de guerra” y advirtieron que “la respuesta no será simétrica, pero será devastadora”. Hasta el momento, el líder supremo, el ayatola Alí Jamenei, no ha emitido un comunicado, aunque se espera una declaración en las próximas horas.

En el terreno militar, Irán ha comenzado a movilizar unidades de la Guardia Revolucionaria y, según analistas, podría recurrir a tácticas asimétricas como ciberataques o acciones encubiertas a través de milicias aliadas en Irak, Siria o el Líbano.

La chispa israelí: detonante del conflicto

El conflicto escaló a principios de junio, cuando Israel lanzó ataques masivos contra supuestas instalaciones nucleares iraníes. El sábado pasado, Tel Aviv se atribuyó la muerte de dos comandantes de la Fuerza Quds y reportó haber neutralizado infraestructura militar iraní en Siria. En respuesta, drones iraníes lograron infiltrarse en el espacio aéreo israelí, lo que provocó un breve estado de alarma en varias ciudades.

Civiles en peligro: advertencia para estadounidenses en Irán

El Departamento de Estado de EE.UU. advirtió este domingo que los ciudadanos estadounidenses aún en Irán deben “estar preparados para refugiarse por períodos prolongados”, dada la ausencia de representación diplomática y la imposibilidad de una evacuación asistida. Suiza, que actuaba como intermediario consular, ha cerrado temporalmente su oficina en Teherán.

La situación es particularmente delicada para los ciudadanos con doble nacionalidad iraní-estadounidense, ya que Teherán no reconoce ese estatus y puede impedirles salir del país.

Reacciones internacionales: entre condenas y llamados a la calma

El Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia condenó “enérgicamente” los ataques estadounidenses, calificándolos como una amenaza directa a la estabilidad global. Por su parte, los Emiratos Árabes Unidos instaron a una “desescalada inmediata” y alertaron sobre el riesgo de que el conflicto arrastre a toda la región a una espiral de violencia sin control.

¿Qué sigue?

El futuro inmediato es incierto. Analistas coinciden en que Irán difícilmente responderá con una guerra abierta, pero podría intensificar sus ataques indirectos y sus operaciones cibernéticas. Mientras tanto, Israel mantiene su nivel de alerta al máximo, y EE.UU. ha reforzado su presencia militar en la región del Golfo.