El presidente Donald Trump dijo “me encantaría” optar a un tercer mandato, pero alentó a J. D. Vance y Marco Rubio para 2028 como ticket “imparable”.
Durante un intercambio con la prensa a bordo del Air Force One mientras se dirigía a Japón, el presidente Donald Trump afirmó que le “encantaría” poder aspirar a un tercer mandato en la Casa Blanca, aunque la Constitución norteamericana lo prohíbe, y simultáneamente respaldó públicamente a J. D. Vance como candidato presidencial y a Marco Rubio como vicepresidente para los comicios de 2028. Las declaraciones reavivan la discusión sobre los límites constitucionales del poder ejecutivo y el futuro del liderazgo republicano.
El presidente Trump hizo estas manifestaciones el 27 de octubre de 2025, durante un vuelo hacia Tokio en la gira asiática de su administración. Allí, ante los periodistas, dijo: “Me encantaría hacerlo. Tengo mis mejores números (en las encuestas) hasta la fecha. Es tremendo”.
Al insistirle sobre si descartaba de manera definitiva un tercer mandato, respondió: “¿No lo estoy descartando? Querrán que les diga. Todo lo que puedo decir es que tenemos un gran grupo de personas, que ellos [los demócratas] no tienen”.
En este contexto, el mandatario dedicó elogios específicos a Vance y a Rubio: “Tenemos a J.D., obviamente. El vicepresidente es genial. Marco es genial. Creo que si alguna vez formaran un grupo, sería imparable”.
Rubio, secretario de Estado de EE.UU., reaccionó con una sonrisa al momento, sin hacer declaraciones formales al respecto.
El trasfondo legal de las afirmaciones de Trump se encuentra en la Twenty‑second Amendment to the United States Constitution, aprobada en 1951, que establece que “ninguna persona podrá ser elegida para el cargo de presidente más de dos veces”.
Pese a ello, Trump ha insistido en entrevistas previas que “existen métodos” para aspirar nuevamente, lo que ha generado debate entre constitucionalistas y analistas políticos.
Antecedentes
La versiones sobre un tercer mandato de Trump ha sido alimentada por cercanos como Steve Bannon, antiguo asesor del mandatario, quien declaró en junio de 2025: “Va a haber un tercer mandato… Trump ’28, Trump va a ser presidente en ’28”.
Por otro lado, la nominación de Vance y Rubio como posibles sucesores refleja la estrategia del Partido Republicano por asegurar continuidad política en la órbita “MAGA”. Vance ha sido considerado como el heredero del movimiento y Rubio aparece como figura de experiencia internacional y latino-americana, lo que suma a su valoración electoral.
Reacciones
Las declaraciones de Trump han generado variadas reacciones. Entre sus seguidores republicanos resulta un mensaje de fortaleza y continuidad; para sus críticos, abre la puerta a incertidumbres constitucionales y a escenarios de conflicto institucional si realmente se intenta eludir el límite de dos mandatos.
Desde el ámbito legal, expertos señalan que aun cuando la 22ª Enmienda prohíbe la elección de un presidente para más de dos términos.
En el plano del Partido Republicano, el respaldo explícito a Vance y Rubio adelanta la construcción de una posible fórmula para 2028, lo que podría acelerar los movimientos internos, las alianzas y el mapa de precandidatos. Asimismo, deja claro que Trump planea seguir teniendo un papel central, aunque no necesariamente como candidato directo.
Con estas declaraciones, el presidente Donald Trump mantiene abierta la incógnita sobre su participación directa en 2028, mientras posiciona a J. D. Vance y Marco Rubio como la fórmula que, en su opinión, haría “imparable” a la derecha estadounidense. Resta por definir si esa estrategia podrá articularse legalmente ante la enmienda constitucional que lo limita o si se optará por vías alternativas. En los próximos meses, los aspirantes presidenciales, los partidos y los tribunales tendrán papel clave para despejar el futuro de la carrera hacia la Casa Blanca en 2028.


