En la madrugada del lunes 27 de noviembre, fue asesinado el empresario paisa, Diego Alejandro Aristizabal García y su acompañante Julián Alexander Ríos Correa, resulto herido.
Hacia las 4 de la mañana cuando los trabajadores del sector de los Martires, se preparaban para regresar a sus casas, se escucharon múltiples disparos, dos sicarios que se transportaban en moto se acercaron a la camioneta de color negro, marca Toyota Prado, y le propinaron a don Diego varios disparos en su cabeza que acabaron con su vida en el centro de Bogotá.
Aristizabal García, de 41 años, dueño de una inmobiliaria y reconocido por ser el propietario de varios estabecimientos de lenocidio fue víctima de un atentado, cuando se desplazaba junto con Julían Alexander Ríos Correa, propietario del Amsterdan Club Electronic, un bar de música electrónica en Bogotá quien resultó herido.
Ríos Correa, por su parte pagó dos condenas una por hurto calificado agravado y otra por concierto para delinquir.
La intrigante pregunta que las autoridades buscan responder es si el atentado estaba dirigido contra Diego Alejandro Aristizabal García o hacia Ríos Correa quien fue testigo del acto de sicariato en el sector de tolerancia.