El presidente del Comité Noruego del Nobel pidió la renuncia de Nicolás Maduro durante la ceremonia del Premio Nobel de Paz 2025, en la que también denunció la crisis humanitaria, la persecución a la oposición y el éxodo de más de ocho millones de venezolanos.
En un pronunciamiento de fuerte impacto político internacional, el presidente del Comité Noruego del Nobel, Jørgen Watne Frydnes, pidió públicamente este miércoles al mandatario venezolano Nicolás Maduro que acepte los resultados de las elecciones presidenciales de 2024 y se retire del poder para permitir una transición democrática. El llamado se realizó durante la ceremonia de entrega del Premio Nobel de la Paz 2025 en Oslo, otorgado a la líder opositora María Corina Machado, quien no pudo asistir al acto y fue representada por su hija, Ana Corina Sosa Machado.
Desde Oslo, el presidente del Comité Noruego del Nobel exigió a Nicolás Maduro que deje el poder tras las elecciones de 2024, denunció torturas, persecución política y calificó el éxodo venezolano como una de las mayores crisis de refugiados del mundo.
“Debe aceptar los resultados electorales y renunciar a su cargo. Debe sentar las bases para una transición pacífica hacia la democracia, porque esa es la voluntad del pueblo venezolano. María Corina Machado y la oposición venezolana han encendido una llama que ninguna tortura, ninguna mentira y ningún miedo podrán apagar”, dijo Frydnes en su discurso de entrega del Premio Nobel de Paz.
“Mientras estamos aquí sentados en el Ayuntamiento de Oslo hay personas inocentes encerradas en celdas oscuras en Venezuela. No pueden oír los discursos de hoy, solo los gritos de los presos que están siendo torturados”, dijo.
En uno de los pronunciamientos internacionales más contundentes contra el gobierno de Venezuela en los últimos años, el presidente del Comité Noruego del Nobel, Jørgen Watne Frydnes, pidió públicamente este miércoles a Nicolás Maduro que acepte los resultados de las elecciones presidenciales de julio de 2024 y se retire del poder para permitir una transición democrática. El llamado se produjo durante la ceremonia de entrega del Premio Nobel de la Paz 2025 en Oslo, concedido a la líder opositora María Corina Machado, quien no logró llegar a tiempo al evento y fue representada por su hija, Ana Corina Sosa Machado.
“Debe aceptar los resultados y dimitir”: el mensaje directo a Maduro
Desde el atril del Ayuntamiento de Oslo, Frydnes emitió un mensaje sin precedentes dirigido directamente al presidente venezolano.
“Señor Maduro, debería aceptar los resultados de las elecciones y dimitir. Debe sentar las bases para una transición pacífica hacia la democracia, porque esa es la voluntad del pueblo venezolano”, afirmó ante delegaciones internacionales.
El presidente del Comité fue aún más contundente al advertir que el poder del chavismo no es perpetuo:
“Tu poder no es permanente”, dijo, subrayando que la presión internacional y la voluntad popular siguen vigentes.
En otro aparte de su discurso, exaltó el liderazgo de la oposición democrática:
“María Corina Machado y la oposición venezolana han encendido una llama que ninguna tortura, ninguna mentira y ningún miedo podrán apagar”, sostuvo.
“Una de las mayores crisis de refugiados del mundo”
Frydnes dedicó un amplio tramo de su intervención a la crisis migratoria venezolana, a la que calificó como una tragedia de dimensión global. Según datos del propio Comité Nobel, más de ocho millones de venezolanos han abandonado su país en los últimos años, lo que equivale a aproximadamente una cuarta parte de su población.
“Estamos frente a una de las mayores crisis de refugiados del mundo en tiempos recientes”, afirmó Frydnes, al tiempo que responsabilizó directamente al régimen de Maduro por el deterioro institucional y la pobreza generalizada.
También denunció que el gobierno venezolano consolidó un sistema de persecución política:
“Venezuela es hoy un Estado brutal y autoritario, sumido en una profunda crisis humanitaria y económica”, dijo, y agregó que “una pequeña élite en la cúspide, protegida por el poder, las armas y la impunidad, se enriquece mientras millones sufren”.
Denuncias de torturas y represión en centros de detención
Uno de los momentos más impactantes del discurso fue cuando Frydnes denunció de manera directa la situación de los presos políticos en Venezuela.
“Mientras estamos aquí sentados en el Ayuntamiento de Oslo, hay personas inocentes encerradas en celdas oscuras en Venezuela. No pueden oír los discursos de hoy, sólo los gritos de los presos que están siendo torturados”, expresó.
“A todos aquellos en Caracas y en otras ciudades de Venezuela que se ven obligados a susurrar el lenguaje de la libertad: Que nos escuchen ahora. Que sepan que el mundo no les da la espalda. Que la libertad se acerca. Y que Venezuela volverá a ser un país pacífico y democrático. Que amanezca una nueva era”, dijo.
“Los regímenes autoritarios aprenden unos de otros. Comparten tecnologías y sistemas de propaganda. Detrás de Maduro están Cuba, Rusia, Irán, China y Hezbollah, que proporcionan armas, sistemas de vigilancia y vías de supervivencia económica. Hacen que el régimen sea más robusto y más brutal”, dijo.
El presidente del Comité afirmó además que “cualquiera que todavía crea en decir la verdad en voz alta puede desaparecer violentamente en un sistema construido específicamente para erradicar esa creencia”.
En ese contexto, calificó como “otra víctima del régimen” el fallecimiento del exgobernador del estado Nueva Esparta, Alfredo Díaz, ocurrido bajo custodia del Estado en la sede del Sebin, en Caracas.
“Murió en El Helicoide, la mayor cámara de tortura de América Latina”, afirmó Frydnes.
Defensa de la oposición y del camino democrático
Frydnes rechazó la narrativa oficial del chavismo sobre la oposición y defendió el historial político de María Corina Machado.
“La señora Machado participó durante años en procesos de diálogo y siempre actuó en el marco de las vías democráticas”, señaló.
Subrayó que su liderazgo nunca ha promovido la violencia:
“Ella ha pedido atención internacional, presión diplomática y apoyo, no una invasión de Venezuela”, indicó.
También destacó que “ha exhortado a los ciudadanos a defender sus derechos por medios pacíficos y democráticos”.
Sobre las elecciones de 2024, explicó que estas fueron determinantes para la concesión del Nobel:
“El proceso electoral de 2024 fue un factor decisivo para este reconocimiento”, dijo, y resaltó el trabajo ciudadano para proteger los resultados:
“La recolección y custodia de las actas fue una movilización de base sin precedentes en Venezuela y probablemente en el mundo entero”.
Críticas al silencio del mundo y a los aliados del régimen
En otro de los fragmentos más autocríticos de su discurso, Frydnes cuestionó a la comunidad internacional por la indiferencia frente a la tragedia venezolana:
“Cuando los venezolanos pidieron al mundo que prestara atención, les dimos la espalda”, afirmó.
Indicó que durante años la comunidad internacional toleró el deterioro de la democracia en Venezuela:
“A medida que los venezolanos perdieron sus derechos, su alimento, su salud, su seguridad y finalmente su futuro, gran parte del mundo se aferró a viejas narrativas”, sostuvo.
También alertó sobre el respaldo geopolítico que sostiene al régimen:
“Los regímenes autoritarios aprenden unos de otros. Comparten tecnologías y sistemas de propaganda”, dijo, y agregó:
“Detrás de Maduro están Cuba, Rusia, Irán, China y Hezbolá, que proporcionan armas, sistemas de vigilancia y vías de supervivencia económica”.
La entrega del Nobel y el mensaje final a los venezolanos
María Corina Machado no pudo llegar a tiempo a la ceremonia, pero el Instituto Nobel confirmó que arribará a Oslo en las próximas horas. Su hija, Ana Corina Sosa Machado, fue quien recibió la medalla y el diploma en su nombre.
En su mensaje final, Frydnes se dirigió directamente a los ciudadanos dentro de Venezuela:
“A todos aquellos en Caracas y en otras ciudades que se ven obligados a susurrar el lenguaje de la libertad: que nos escuchen ahora”, expresó.
“Que sepan que el mundo no les da la espalda. Que la libertad se acerca”, añadió.
Y concluyó con un mensaje de esperanza: “Venezuela volverá a ser un país pacífico y democrático. Que amanezca una nueva era”.
Las declaraciones del presidente del Comité Noruego del Nobel marcan uno de los pronunciamientos internacionales más severos contra el gobierno de Nicolás Maduro desde Europa. En medio de una crisis humanitaria, política y migratoria de dimensiones históricas, el llamado a la renuncia del mandatario venezolano refuerza la presión internacional para que se respete la voluntad expresada en las urnas en 2024 y se abra un camino hacia una transición democrática aún incierta.


