
La canciller y el ministro del Interior quien es investigado por violencia de género, enriquecimiento ilícito y agresiones en el exterior: “No voy a callar”
En medio de un clima político tenso dentro del Gobierno, la canciller Laura Sarabia compareció este miércoles ante la Fiscalía General de la Nación con una declaración judicial contra el ministro del Interior, Armando Benedetti. La funcionaria entregó siete carpetas con pruebas que, según su equipo legal, demostrarían agresiones físicas y verbales, un presunto caso de enriquecimiento ilícito, y episodios de violencia ocurridos en España.
Únete a Nuestro Canal de WHATSAPP 📲CLICK AQUÍ
“Ser parte del Gobierno no significa renunciar a mis derechos. y que haya renunciado a ejercer los mismos y a rendir declaraciones o a presentarme ante las autoridades competentes”, aseguró Sarabia antes de iniciar su diligencia.
Una denuncia con nombre y apellido
La denuncia se suma a las tensiones que desde hace meses fracturan la relación entre Sarabia y Benedetti, quienes fueron cercanos en el pasado. Sarabia, que trabajó como asesora de Benedetti en el Senado, ahora lo acusa formalmente ante la justicia colombiana.
Las carpetas que entregó a la Fiscalía estaban visiblemente marcadas con títulos como “Violencia contra la mujer y otros delitos” y “Patrón de comportamiento criminal”. Su equipo jurídico afirmó que en próximas sesiones se presentarán audios, mensajes y otros documentos clave para el caso.
“La defensa del buen nombre no es vanidad, es justicia”
Sarabia ha enfatizado que su decisión de llevar el caso ante la Fiscalía responde a una coherencia con denuncias pasadas y a su compromiso con la transparencia.
“La defensa del buen nombre no es un acto de vanidad, es un acto de justicia”, expresó durante una rueda de prensa previa a su declaración. “Va en coherencia a denuncias de 2023, a que siempre he dado cuentas de lo que es de mi conocimiento y competencia, y no dejaré de hacerlo”.
Desde el entorno de la canciller se indicó que estas pruebas también evidenciarían campañas de descrédito dirigidas en su contra, muchas de las cuales habrían comenzado desde que se filtraron los polémicos audios en los que Benedetti la insultaba.
Un caso internacional
Uno de los hechos más graves dentro de la acusación tiene relación con una denuncia radicada en España en julio de 2024 por Adelina Guerrero, esposa de Benedetti. La mujer aseguró en su momento que el ahora ministro la amenazó con un cuchillo en su residencia de Madrid. Aunque Guerrero se retractó posteriormente, el episodio sigue siendo parte del expediente que Sarabia llevó ante las autoridades.
“Estar en el Gobierno no significa que haya renunciado a ejercer mis derechos»: Sarabia
A pesar de las posibles repercusiones políticas por denunciar a un miembro del mismo gabinete, Sarabia fue enfática: “Estar en el Gobierno no significa que haya renunciado a ejercer mis derechos ni a presentarme ante las autoridades competentes”.
También recordó al Papa Francisco, en un mensaje simbólico relacionado con su reciente viaje a Roma: “Él decía que no podíamos callar cuando se trata de defender lo que es justo”.
Dos mujeres del equipo jurídico de la Canciller, durante la rueda de prensa, llevaban carpetas blancas, y las tenían en sus manos de tal forma que para los periodistas era claro su contenido: “Caso Penal contra Armando Benedetti”, “Violencia contra la mujer y otros delitos”, “Violencia autoridades españolas, patrón de comportamiento criminal”,
Silencio desde la Presidencia
Hasta ahora, ni el presidente Gustavo Petro ni el ministro Benedetti han emitido declaraciones sobre los señalamientos de Sarabia. El mandatario ha defendido en varias ocasiones a ambos funcionarios, aunque este episodio pone a prueba su capacidad para mantener la cohesión en su equipo más cercano.
El trasfondo político
La denuncia de Sarabia ocurre en vísperas del Día del Trabajo, cuando el Gobierno buscará revivir su reforma laboral con una consulta popular. Sin embargo, este escándalo podría desviar la atención de los esfuerzos del Ejecutivo y aumentar la tensión interna.
“Siempre he agradecido al presidente Petro, que me ha enseñado que uno no puede callar ante la injusticia y que me ha apoyado y jamás me ha pedido ir en contra de la verdad y de la justicia”, concluyó la canciller.