
El nombre de Luis Alberto “Lucho” Herrera, una leyenda del ciclismo colombiano, volvió a acaparar titulares, pero esta vez no por su destreza en la montaña, sino por una acusación judicial. El Juzgado Cuarto Penal del Circuito de Fusagasugá compulsó copias a la Fiscalía General de la Nación para que se investigue al exciclista por su presunta participación en la desaparición forzada y homicidio de cuatro vecinos en 2002, un caso ahora declarado crimen de lesa humanidad.
¿Qué ocurrió en octubre de 2002?
Gonzalo Guerrero Jiménez, Víctor Manuel Rodríguez Martínez, José del Carmen Rodríguez Martínez y Diuviseldo Torres Vega desaparecieron el 23 de octubre de 2002, en la vereda La Aguadita, municipio de Fusagasugá. Según declaraciones de tres exparamilitares, fueron señalados falsamente como milicianos de las FARC, capturados con ayuda de un sargento del Ejército y posteriormente asesinados.
Las víctimas eran, en realidad, vecinos de finca del exciclista, y según los testimonios, no quisieron vender sus tierras. Esa habría sido —según los exparas— la verdadera razón detrás del crimen.
Lucho Herrera será investigado por la Fiscalía General de la Nación luego de que exparamilitares lo salpicaran en caso de desaparición forzada. En el año 2000 el ciclista fue secuestrado por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) durante veinticuatro horas.
“Nos dio fotos y dinero”: los testimonios que comprometen a Herrera
En una sentencia fechada el 7 de abril de 2025, la jueza María del Pilar Bocarejo condenó a Luis Fernando Gómez Flórez, alias Ojitos, a 22 años y seis meses de prisión. En su testimonio, Gómez asegura que Herrera no solo conocía al jefe paramilitar Martín Llanos, sino que le entregó información clave para ejecutar el crimen:
“Llego a la finca, me atiende Lucho Herrera, me ofrece algo de beber y me entrega dos sobres de manila. En uno venían las fotos de cuatro personas que teníamos que recoger, dijo que eran milicianos de la guerrilla; en el otro sobre había $40 millones. Nos dijo que era para comprar pistolas y motos”, relató ‘Ojitos’.
“El señor Lucho Herrera me ofrece algo de beber y me da dos sobres de manila, en uno de ellos venían las fotos de 4 personas que teníamos que recoger, dijo que eran milicianos de la guerrilla que lo iban a secuestrar, y en el otro sobre había 40 millones y nos dice que si queremos para comprar unas pistolas y unas motocicletas. Esa gente colindaba con la finca de él”, dijo uno de los exparamilitares
También relató que Herrera les indicó que las personas vivían cerca de su finca y que lo querían secuestrar.
“Se reunió con don Martín y nos dan la orden que lo que el señor Lucho necesitara en Fusa (…) viniendo del Meta, nos dice que tiene que mandar a limpiar a esa gente, que era miliciana de la guerrilla, pero que cualquier cosa nos entendiéramos con un señor de nombre Rafael, no sé si es el hermano o familiar, como a los 8 días el señor Rafael me llama y yo subo a la finca de Silvania para arriba”, dijo ‘Ojitos’.
El paramilitar alias «Ojitos» señaló: “Llego a la finca, es grande de techo rojo, y me atiende el señor Lucho Herrera, me ofrece algo de beber, me da una botella de agua, y me dice que tiene algo para darme, sale y me da dos sobres de manila, en uno de ellos venían las fotos de 4 personas que teníamos que recoger, dijo que eran milicianos de la guerrilla, que lo iban secuestrar y en el otro sobre había $40.000.000 y nos dice que si quiere para comprar unas pistolas y unas motocicletas. Esa gente colindaba con la finca de él, eran fincas pequeñas que colindaban con la finca de él”.
Secuestro, ejecución y descuartizamiento
El relato de alias Menudencias sobre los hechos es crudo:
“A esa gente la recogimos en una camioneta Toyota Hilux. Fuimos con el sargento Fredy Espitia, Camargo, Mala Sombra y otros. Usamos distintivos del DAS, con chalecos y gorras, eran como las 6 y 7 de la noche. Metimos a dos en el platón y dos en la parte de adelante”, explicó el exparamilitar, quien, además, dio detalles del crimen.
“Los inhumamos en la Vía Novilleros a La Aguadita, en una Finca sobre el borde la carretera. Los degollamos y luego los descuartizamos con machete. Hicimos dos fosas, dos huecos pequeños, por ahí de 50X50 a la altura del pecho, por ahí a 1.50 metros (de profundidad). Partidos en 6 pedazos, cabeza, brazos, piernas y tronco”.
Los degollamos y los descuartizamos con machete. Hicimos dos fosas pequeñas, de unos 50×50 cm, en una finca cerca a la carretera a La Aguadita”.
La participación de un militar activo del B2 del Ejército —el sargento Espitia— también fue mencionada en el testimonio.
¿Qué papel jugó un familiar de Herrera?
Alias Ojitos y Camargo coinciden en señalar a un hombre identificado como ‘Rafael’, quien sería familiar del ciclista, como intermediario entre Herrera y los paramilitares.
“Como a los ocho días, Rafael me llama y subo a la finca. Me entrega fotos y me da la instrucción de Herrera, dijo que eran milicianos de la guerrilla que lo iban a secuestrar y en el otro sobre habían $40.000.000 y nos dice que si quiere para comprar unas pistolas y unas motocicletas”, testificó Gómez Flórez.
¿Vínculo directo con Martín Llanos?
Los tres exparamilitares coincidieron en que Herrera mantuvo reuniones con alias Martín Llanos, jefe de las Autodefensas Campesinas del Casanare. Supuestamente, tras ser secuestrado por las FARC en 2000, Herrera habría establecido contacto con Llanos para garantizar su seguridad en la zona rural de Fusagasugá.
Un crimen de lesa humanidad, sin vuelta atrás
La Fiscalía General de la Nación catalogó el caso como crimen de lesa humanidad, lo que implica que no prescribe. El caso se reabre más de 20 años después gracias a estos testimonios, el ente acusador ahora tiene la tarea de determinar si existen méritos suficientes para imputar cargos al excampeón de ciclismo.
El juez decidió «Compulsar copias ante la Fiscalía General de la Nación en contra de Lucho Herrera, con el fin de que, en el evento de que no se haya adelantado investigación, se investigue la presunta participación en las conductas punibles de desaparición forzada agravada en concurso homogéneo y homicidio agravado».
Herrera se defiende
Contactado por La W Radio, Lucho Herrera negó cualquier vínculo con los hechos:
“Voy a dar todas las explicaciones a las autoridades. Soy ajeno a los hechos que se noticiaron. Estoy consultando a mi abogado para presentarme ante la Fiscalía”, señaló en un breve comunicado.
Lucho Herrera
Luis Alberto Herrera Herrera (Fusagasugá, 1961) fue el primer colombiano y latinoamericano en ganar una de las tres grandes vueltas del ciclismo europeo: la Vuelta a España en 1987. Fue símbolo nacional durante los años 80 y 90, célebre por su fuerza en la montaña y por representar a Colombia en lo más alto del podio.
📝 Esta historia está en desarrollo. Seguiremos actualizando a medida que avance la investigación judicial.