Huracán Melissa se debilita a categoría 2 tras su paso por Cuba; al menos 10 muertos por inundaciones en Haití

La tormenta, que alcanzó categoría 5 al tocar Jamaica, avanza hacia las Bahamas dejando destrucción, evacuaciones masivas y graves afectaciones en servicios básicos.


Melissa deja huella devastadora en el Caribe

El huracán Melissa continúa desplazándose hacia el norte tras haber tocado tierra en Cuba durante la madrugada de este miércoles como ciclón de categoría 3, con vientos superiores a 185 km/h. Aunque ahora se ha debilitado a categoría 2, su impacto sigue siendo severo.
En Haití, las autoridades confirmaron al menos 10 fallecidos por inundaciones y deslizamientos prolongados luego de una semana de lluvias continuas. En República Dominicana se registró también la muerte de una persona.

En Cuba, el presidente Miguel Díaz-Canel advirtió que la isla enfrenta “daños significativos”, con ríos desbordados, viviendas anegadas y unas 241 comunidades incomunicadas, afectando a más de 140.000 personas. Más de 735.000 residentes fueron evacuados como medida preventiva antes del impacto.

“Exhorto a nuestro pueblo a mantenerse vigilante, a mantener la disciplina y a continuar tomando todas las precauciones necesarias”, escribió el mandatario en X.


Jamaica: zona de desastre

Melissa alcanzó Jamaica el martes como huracán categoría 5, uno de los más intensos en la historia del Atlántico, con vientos de hasta 298 km/h.
El primer ministro Andrew Holness declaró zona de desastre nacional, advirtiendo que hospitales, viviendas y escuelas han sufrido daños extensos.

La infraestructura de telecomunicaciones ha sido gravemente afectada: más del 70 % de los usuarios quedó sin electricidad y la conectividad a internet cayó a niveles del 30 %, según reportes de monitoreo.
Turistas y residentes permanecen en refugios mientras avanzan las labores de limpieza.

“Fue aterrador… escuchar el viento y ver caer árboles, postes y objetos por todas partes”, relató Natassia Wright, residente cercana a Kingston.


Ayuda internacional y el camino hacia Bahamas

A medida que Melissa se desplaza hacia el norte-noreste, se espera que entre nuevamente al mar y avance hacia las Bahamas, donde continúan las alertas por marejada ciclónica de hasta 2,4 metros y lluvias de entre 125 y 250 milímetros en las islas centrales y del sureste.
Las autoridades locales han ordenado evacuaciones preventivas en Acklins, Crooked Island y sectores vulnerables.

El Reino Unido anunció el envío de US$ 3,3 millones en ayuda humanitaria para apoyar la recuperación en el Caribe, con énfasis en Jamaica. El plan incluye filtros de agua, mantas, kits de refugio y personal técnico desplegado en la región.
“Estamos actuando con rapidez para apoyar a las autoridades jamaicanas ante esta terrible tormenta”, señaló la secretaria de Relaciones Exteriores, Yvette Cooper.

El presidente estadounidense Donald Trump también aseguró que Washington sigue “de cerca” la emergencia y está dispuesto a asistir a países afectados:

“Por razones humanitarias, tenemos que hacerlo”, dijo el mandatario.


Una tormenta histórica e impulsada por el clima

Meteorólogos señalan que Melissa es uno de los huracanes más poderosos registrados en el Atlántico. Fue el tercer ciclón categoría 5 de la temporada 2025, fenómeno que expertos atribuyen al calentamiento global y al aumento de temperatura en el Caribe.

“Esta tormenta prácticamente hizo todo lo que uno no querría que hiciera”, explicó Daniel Swain, investigador climático de la Universidad de California (UCLA), en referencia a su rápida intensificación y a su desplazamiento lento que agravó las inundaciones.

En Cuba se prevé que persistan lluvias durante toda la jornada, especialmente en zonas montañosas donde podrían acumularse más de 600 milímetros, elevando el riesgo de deslizamientos y crecidas súbitas.


Lo que viene

Melissa continuará alejándose de Cuba en las próximas horas en dirección a las Bahamas, aunque sus bandas nubosas seguirán afectando a Haití, República Dominicana y Turcas y Caicos.
En tanto, equipos de respuesta trabajan para restablecer servicios básicos, despejar vías y evaluar daños.

Las autoridades insisten en que, aunque la tormenta se debilitó, sus efectos siguen siendo peligrosos debido a las inundaciones, marejada ciclónica y estructuras comprometidas en áreas afectadas.