Una fuerte explosión registrada en la tarde del 1 de noviembre en un supermercado de la cadena Waldo’s, ubicado en el centro de Hermosillo, Sonora, dejó un saldo preliminar de 23 personas fallecidas y 12 heridas, según autoridades mexicanas.
Entre las víctimas se encuentran menores de edad. La mayoría de los fallecidos habría perdido la vida por inhalación de gases tóxicos, de acuerdo con el fiscal general de Justicia del Estado, Gustavo Salas, quien indicó que la identificación de cuerpos continúa y que los heridos han sido trasladados a diferentes centros asistenciales.
Hipótesis inicial: un accidente dentro del local
Las primeras investigaciones señalan que el incidente podría haberse originado por un transformador eléctrico instalado dentro del establecimiento. Aunque esta sería la causa más probable, la Fiscalía mantiene abiertas todas las líneas de investigación.
“Hasta el momento no tenemos ningún indicio que nos haga presumir que el incendio fue intencional”, precisó el fiscal Salas durante una conferencia de prensa.
Autoridades prometen esclarecer responsabilidades
El gobernador Alfonso Durazo aseguró que se adelanta una investigación exhaustiva:
“Nadie enfrentará este dolor en soledad. Los cuerpos de emergencia actuaron con gran profesionalismo y compromiso, controlando la situación y salvando vidas”, expresó en un mensaje a través de redes sociales.
Por su parte, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, envió condolencias a familiares y seres queridos de las víctimas.
La Secretaría de Seguridad Pública del estado descartó que el hecho esté relacionado con un ataque dirigido contra civiles.
Cadena comercial expresa solidaridad
Waldo’s emitió un comunicado en el que lamentó profundamente la tragedia y se comprometió a colaborar “de manera transparente y responsable” con las autoridades para esclarecer lo ocurrido.
Zona acordonada y actividades canceladas
Medios locales reportaron que la explosión se produjo alrededor de las 14:00 horas. Tras el estallido, algunas personas habrían intentado refugiarse dentro del local, quedando atrapadas mientras el fuego se expandía rápidamente.
Comercios cercanos suspendieron sus actividades y las autoridades ordenaron evacuar el sector. También fueron canceladas las actividades del Día de Muertos que se tenían previstas en esa zona de la ciudad.
Imágenes difundidas por la prensa mexicana muestran la fachada del supermercado casi destruida, con amplios ventanales rotos y severos daños provocados por las llamas, una escena que evidencia la magnitud de la tragedia que enluta hoy a la capital de Sonora.