En un comunicado emitido por la Defensoría del Pueblo, Carlos Camargo Assis, hace un llamado al ELN para que se una al compromiso de renunciar al secuestro, siguiendo el anuncio previo del Estado Mayor Central de las disidencias de las Farc.
Después de que fuera anunciado, al cierre del segundo ciclo de conversaciones entre el Gobierno Nacional y el Estado Mayor Central de las disidencias de las Farc, donde este grupo armado ilegal renunció a los secuestros con fines económicos, el Defensor del Pueblo, le hizo un llamado al ELN a tener la disposición de avanzar con hechos concretos en los diálogos de paz.
“Al anuncio de dejar de secuestrar, hecho por el Estado Mayor Central de las disidencias de las Farc, debe sumarse inmediatamente el ELN. Ahora que es adelantado el quinto ciclo de negociación en Ciudad de México, la mejor noticia que desde la mesa de diálogos se le puede dar al pueblo colombiano es que el Ejército de Liberación Nacional también renuncia a la desalmada práctica del secuestro en el país”, expresa el Defensor del Pueblo.
Además, le reitero a estos grupos armados que confirmen los nombres de las personas que tienen en cautivero y los entreguen sanos y salvos para que pasen estas festividades de fin de año con sus familias, también podrian mediar en las entregas humanitarias, no importa el lugar de la geografía nacional, las condiciones de orden público o de difícil acceso, indicó el Defensor.
Si bien es un avance el anuncio del EMC, Camargo Asis deja claro que la paz no solamente se consigue dejando de secuestrar: “Es un llamado a todos los grupos armados al margen de la ley, también es posible alcanzarla dejando de reclutar a niñas, niños y adolescentes, entregando a los menores de edad que tienen en sus filas, dejando de extorsionar y dejando de afectar los derechos fundamentales de la población colombiana”.
Finalmente, insta a las disidencias de Iván Mordisco cumplir su compromiso, subrayando que la paz va más allá de dejar de secuestrar e incluye cesar reclutamientos, liberar a menores y respetar los derechos fundamentales de la población colombiana.