La Cámara de Representantes de Colombia ha dado un paso significativo al aprobar en el cuarto debate el proyecto de ley destinado a regular los cigarrillos electrónicos, comúnmente conocidos como vapeadores, en el país.
Esta iniciativa, busca integrar estos productos dentro de la Ley 1335 de 2009, también conocida como la «Ley Antitabaco».
Más allá de las implicaciones económicas, el objetivo principal de esta regulación es reducir el consumo de tabaco entre los menores de edad. Para lograrlo, se proponen medidas como limitar la venta de vapeadores y su exposición en vitrinas, así como implementar programas de salud y educación que desincentiven su consumo y promuevan el abandono de la dependencia tabáquica.
De acuerdo con cifras proporcionadas por el Instituto Nacional de Salud (INS), aproximadamente el 5% de la población colombiana entre los 12 y 65 años ha utilizado vapeadores, y alarmantemente, el 25% de estos usuarios son menores de edad.
El proyecto de ley, denominado proyecto de ley 325 y presentado por los senadores Hurtado y Name, ha superado la discusión tanto en el Senado como en la Cámara de Representantes, quedando pendiente únicamente la conciliación de los textos y la firma del presidente Petro para convertirse en ley.
¿Qué busca exactamente este proyecto de ley? En esencia, busca modificar la Ley 1335 de 2009 para ampliar su alcance y abarcar productos como los vapeadores y los cigarrillos electrónicos. Esto implica extender la prohibición de fumar en lugares públicos cerrados y limitar la publicidad y promoción de estos productos.
Una característica particular, pero también un riesgo asociado con los cigarrillos electrónicos, es su capacidad de cambiar tanto el dispositivo como la solución que se utiliza, lo que permite a los consumidores adquirir productos con mayores concentraciones de nicotina y alterar las propiedades del aerosol inhalado.
A nivel mundial, el consumo de productos de tabaco sigue siendo un problema de salud pública, especialmente en países de bajos y medianos ingresos como Colombia. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en 2018 había 43 millones de consumidores de tabaco menores de edad, una cifra preocupante que subraya la urgencia de tomar medidas para abordar este problema.
Entre los aspectos más relevantes de la regulación de los vapeadores y cigarrillos electrónicos se incluyen la prohibición de la fabricación y expedición de productos que aludan a cigarrillos o vapeadores, así como la implementación de programas educativos sobre los riesgos asociados con su consumo.