El presidente del Congreso, Efraín Cepeda, aseguró que si se tendría que aplicar la “silla vacía” en el caso del senador Iván Name, tras ser capturado por el caso de la UNGRD. Más sin embargo afirmó: “Creo en la presunción de inocencia del expresidente Iván Name, él se debe defender, él no ha sido condenado”.
Tras las órdenes de captura emitidas por la Corte Suprema de Justicia contra los expresidentes del Senado, Iván Name (Partido Verde), y de la Cámara de Representantes, Andrés Calle (Partido Liberal), dos sillas han quedarán oficialmente vacías. No solo simbólicamente: jurídicamente.
Ambos congresistas están señalados por su presunta participación en una red de corrupción ligada a la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD). Las acusaciones incluyen los delitos de cohecho y peculado por apropiación, en un entramado que habría movido más de 4.000 millones de pesos en sobornos para favorecer reformas legislativas impulsadas por el Gobierno Nacional.
Una captura y una búsqueda
Iván Name fue capturado en su apartamento en el norte de Bogotá hacía las 4 de la tarde. El operativo fue ejecutado por el CTI de la Fiscalía y la Policía Nacional, quienes, le leyeron sus derechos y procedieron con su detención.
Por su parte, Andrés Calle no fue hallado en su residencia cuando las autoridades intentaron ejecutar la orden. A esta hora, mientras las fuerzas del orden vigilan puntos estratégicos de la ciudad en espera de su entrega voluntaria.
¿Por qué no pueden ser reemplazados?
La Constitución colombiana, en su artículo 134, contempla una figura conocida como la silla vacía. Este mecanismo impide que los partidos políticos reemplacen a congresistas involucrados en delitos contra la administración pública, como la corrupción. Es una medida que busca desincentivar prácticas ilícitas dentro de las colectividades y enviar un mensaje claro: los actos individuales también comprometen la representación política.
En este caso, tanto el Partido Verde como el Partido Liberal pierden sus curules. Nadie podrá ocupar esas sillas. El Congreso funcionará con dos miembros menos, al menos hasta el fin del periodo legislativo o hasta que la justicia se pronuncie de manera definitiva.
¿Qué es la silla vacia?
La figura de «silla vacía» en el Congreso se refiere a la pérdida del escaño de un congresista debido a una condena por delito, lo que impide que ese congresista asista a las sesiones y vote. Esta medida se aplica a congresistas condenados por delitos contra la administración pública, como peculado, cohecho, etc. La silla vacía afecta el quórum y las mayorías necesarias para tomar decisiones en el Congreso.
En resumen, la «silla vacía» es una sanción que impide a un congresista desempeñar su cargo como consecuencia de una condena judicial, y que puede tener implicaciones en la composición del Congreso y en la toma de decisiones.
Name con 20 años en el Parlamento; Calle, una figura emergente del liberalismo.
Una despedida anticipada
En su último discurso ante el Senado, el 6 de mayo, Iván Name dejó entrever que intuía su destino:
«No sé si esta sea mi despedida (…) No sé si mañana vuelva, pero le digo a mi Senado que siento el orgullo de haber pertenecido 20 años al Parlamento».
Su curul, como la de Calle, hoy está vacía. Y así quedará.


